El mundo legal alrededor del M&A está cambiando y la tecnología es el motivo. Por un lado el sector goza de buena salud, los últimos indicadores así lo confirman. Nos encontramos que en el primer trimestre del ejercicio 2018 las operaciones de M&A en España han registrado un aumento del 14,6% en el número de ellas y del 47,78% en el importe de las mismas. El mercado transaccional español ha cerrado estos tres primeros meses del año con un total de 524 operaciones de M&A según el informe trimestral sobre el mercado transaccional ibérico de TTR.
Con relación a sectores, parece que el sector inmobiliario ha sido el más activo a lo largo del trimestre seguido por el tecnológico y el de Internet. Justamente son estos dos últimos sectores los que están marcando el futuro de las fusiones y adquisiciones.
Las herramientas tecnológicas que actualmente disponemos algunos despachos legales hacen que el sector se encuentre en movimiento ya que existen muchas tareas que pueden ser automatizadas recortando así considerablemente el tiempo necesario para realizar los procesos de M&A y por tanto reduciendo los costes de asesoramiento. Si bien los gurús tecnológicos hace tiempo que a los abogados nos han “dado por muertos” y “enterrados”no parece que eso vaya a suceder…, al menos a corto y medio plazo. Lo que sí es posible, gracias a la tecnología, es que seamos más efectivos. Básicamente las soluciones tecnológicas que existen hoy en día nos ayudan a manejar gran cantidad de datos, a analizar más rápidamente los documentos y a crear entornos fáciles y dinámicos de comunicación y colaboración entre los distintos equipos de abogados así como con los clientes.
El sector “legal tech” está en sus inicios y ya mueve 15,9 mil millones de dólares a nivel mundial y esto es solo el comienzo ya que se esperan crecimientos exponenciales en los próximos años. En el mundo del M&A, esto supondrá un amenaza para las firmas tradicionales que no asuman el cambio ya que no podrán adaptar sus tarifas a la productividad de las firmas legales tecnológicas.
Por norma general, los abogados recelamos de la tecnología, existen muy pocos “legal geeks”, pero también es cierto que artículos tales como ”las máquinas sustituyen a los abogados” Y “Los Robot Lawyers ya están aquí y están ganando” generan desconfianza y crean una falsa sensación de realidad sobre las soluciones tecnológicas legales disponibles hoy en día. La tecnología está aquí para quedarse y seguirá evolucionando con el fin de mejorar la eficacia y la eficiencia de los abogados y por tanto su productividad, como en su día lo hizo el ordenador, internet, los móviles o la tabletas.